
En el mundillo del bonsai existen infinidad de fórmulas y técnicas que aplican a cada uno de nuestros trabajos, muchas de ellas se refieren al cuidado de nuestras plantas; lo cierto que es que desde mi pequeña experiencia he podido comprobar que no todo se puede aplicar a nuestro caso; específicamente quisiera tocar el tema del abonado y el trasplante, claro recomendado como trabajos exclusivos de la primavera; en ambos casos quisiera aportar que desde nuestro clima nada extremo y por demás poco marcado, incluso podemos llegar a obtener un resultado adecuado; yo lo llamo segunda primavera y ocurre más o menos desde finales de marzo a la quincena de mayo, y es que las especies bien adaptadas producen una segunda brotación, sino la tercera o la cuarta en esta época, esto debido no sólo al factor clima: con temperaturas muy estables; también a un continuo abonamiento (abono orgánico), y que en mi caso realizo en promedio una vez al mes y en cantidades medias. Por lo demás este es sólo un ejemplo de como nosotros no necesitamos aplicar técnicas o métodos que se aplican a otras latitudes y que en poco o nada son aplicables a el clima de Lima.